El uso del dron se está extendiendo en aplicaciones que exponen a riesgos al personal de las instalaciones para poder llevar a cabo trabajos como inspecciones en espacios confinados o trabajos en altura. El equipamiento que estos aparatos pueden transportar es cada día más completo y útil en el ámbito industrial. Inicialmente, sólo portaban cámaras de foto y/o video, pero con los avances tecnológicos de los últimos años, se le ha equipado con cámaras termográficas, sensores LIDAR o medidores de ultrasonidos.
Las aplicaciones en este campo van incrementándose conforme se aumenta las posibilidades del dron para cargar con equipamiento de medición y se amplía la capacidad de la batería para que los vuelos sean más largos.
En Ematec apostamos por esta herramienta como una opción real para acometer trabajos que de otra manera sería mucho más complejos, costosos e inseguros o directamente no podríamos completar. Creemos y hemos podido comprobar que la tecnología de este tipo de equipos amplía significativamente el rango de capacidades en las tareas de mantenimiento y operación en entornos industriales.
Un ejemplo en el que el dron es claramente útil es en la inspección de silos, depósitos o tanques, donde el acceso es limitado. Los resultados, además de las imágenes de video donde se puede comprobar visualmente el estado del equipo, es una nube de puntos de todo el recorrido realizado y que nos permite, a posteriori, en el ordenador, analizar secciones del habitáculo/equipo para comprobar diámetros, desgastes, diferencias de espesor…
BENEFICIOS
Los beneficios del uso de esta tecnología están muy claros, y son:
- Rápidez.
- Riesgo CERO.
- Llega donde no se puede acceder o donde necesitaríamos medios auxiliares para llegar.
- Queda registrado y se puede analizar tantas veces como se desee.
